Guía práctica para el mantenimiento de un calentador a gas

Un calentador bien cuidado no solo asegura un suministro constante y eficiente de agua caliente, sino que también ayuda a prevenir accidentes graves como fugas de gas o acumulaciones de monóxido de carbono. Para lograrlo, es importante establecer una rutina de limpieza regular y realizar revisiones técnicas periódicas.

Limpieza regular

Apaga el calentador y cierra la llave de gas. Esto evita accidentes durante el proceso de mantenimiento.

Limpia la carcasa exterior con un paño húmedo para eliminar polvo y suciedad, previniendo así la corrosión.

Inspecciona los quemadores y retira restos de suciedad o hollín con un cepillo suave.

Si el calentador incluye un intercambiador de calor, utiliza una aspiradora para eliminar acumulaciones de polvo.

Mantenimiento del sistema de ventilación

Asegúrate de que los conductos de ventilación estén despejados para permitir la correcta evacuación de gases.

Limpia las salidas de aire regularmente y verifica que no estén bloqueadas por objetos o polvo.

Verificación de la llama

Una llama ideal debe ser azul y estable.

Si es amarilla, débil o parpadeante, puede indicar problemas con la entrada de gas y aire, o suciedad en los quemadores.

Ante estas señales, contacta con un técnico especializado para realizar los ajustes necesarios.

Revisión del encendido automático

Si tu calentador tiene encendido automático, revisa regularmente el estado de las pilas.

Cámbialas si notas que el encendido es lento o no funciona correctamente.

Inspección de las conexiones de gas

Aplica agua jabonosa en las conexiones de gas para detectar posibles fugas. Si ves burbujas, cierra la llave de paso y llama a un técnico.

Revisa también las válvulas y las mangueras para asegurarte de que no presenten desgaste, grietas o corrosión.

Limpieza del filtro de agua

Algunos modelos incluyen un filtro de agua que debe limpiarse periódicamente para evitar obstrucciones.

Consulta el manual del usuario para retirarlo y limpiarlo adecuadamente ante de volver a instalarlo.

Descalcificación del serpentín

Si vives en una zona con agua dura, los minerales pueden acumularse en el serpentín y reducir la eficiencia del calentador.

Usa un descalcificador para tu hogar o utiliza una solución desincrustante recomendada por el fabricante o contacta con un técnico para que realice este procedimiento.

Realiza una revisión técnica anual

Aunque muchos pasos pueden realizarse en casa, es fundamental que un técnico calificado realice una inspección exhaustiva al menos una vez al año para verificar los componentes internos, revisar la presión del gas y comprobar que no existan fugas ni daños en el equipo.

Consejos adicionales de seguridad

No uses productos inflamables cerca del calentador.

Instala el calentador en un área bien ventilada.

Si detectas olor a gas, cierra inmediatamente la llave de paso, ventila el espacio y contacta con un profesional.

Recuerda que cada modelo tiene características y requerimientos específicos. Antes de realizar cualquier acción de mantenimiento, revisa las instrucciones del fabricante para asegurarte de seguir las indicaciones adecuadas.

Con estos pasos, podrás garantizar que tu calentador a gas funcione de manera segura, eficiente y duradera. Un mantenimiento adecuado no solo prolonga la vida útil del equipo, sino que también proporciona tranquilidad y confort en tu hogar. Y si necesitas cambiar tu calentador antiguo, en nuestra sección de Calentadores de agua a gas encontrarás el que mejor se adapte a tus necesidades. Si necesitas más información no dudes en contactar con nosotros por Whatts App o desde nuestro Formulario de contacto.